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Tras una noche de fiesta, Khloe Kapri acabó despertando desorientada y sin saber muy bien donde estaba. Empezó a caminar hasta que un chico mulato apareció con su coche y le dejó subirse. La rubia estaba muy agradecida y quiso compensarle de alguna manera, empezando por chuparle su enorme polla en el coche. Luego se fue a su casa y una vez en la cama, se pusieron a follar como animales, hasta notar como el negro rellenaba su coño con un creampie.